Esta celebración se encuentra arraigada a la época prehispánica, misma que se encuentra relacionada con ciertas creencias y prácticas religiosas que en ese entonces realizaban los pueblos andinos respecto a la actividad y producción agrícola. De allí, que la población como muestra del patrimonio vivo cultural sorateña realiza festejos a través de rituales a la Madre Tierra “Pachamama” como símbolo de agradecimiento a la primera cosecha, misma que es conocida como “Challa”.
Otras actividades que son parte de esta celebración se tienen: la challa de instituciones públicas y privadas, corso carnavalero de niños y jóvenes, ingreso de fraternidades de “Chutas” y challa general, finalizando la misma con el domingo de tentación.
Esta última, es un festejo muy peculiar, donde la población joven sale por la noche en comparsas acompañados de la moseñada a divertir a la población sorateña con pasos pintorescos en el que se destaca el “Achachianata”
Durante estos festejos las calles del centro de Sorata se llenan de visitantes nacionales y extranjeros para festejar estos días con agua y espuma al ritmo de la tradicional moseñada.